Sal de mi corazón, ahí tienes la puerta.

         “Estas enfadado, y no puedo hacer nada, porque yo soy la culpable y lo hecho hecho está.
Que estaba mal, sola, desorientada, de todo.. pero No se puede perdonar, mi humillación es tan grande como la gravedad de lo que te hice. Tu rostro se va volviendo lentamente hacía la salida de mi corazón, de algo que poco a poco habíamos construido, alejándose de mi amor, de mi.

          Es gracioso, yo, hace unos meses fardaba, reía contigo, soñaba con tus besos, vivía para ti, y por ti. Pero en esta vida nada es eterno y yo me he cansado de nuestras tardes, de nuestros besos, de lo nuestro, al fin y al cabo.

          Me he aburrido de ser una esclava, aunque yo lo hubiera elegido. Y cuando te aburres buscas otro entretenimiento, y eso es lo que hice, se que no tiene perdón, pero mira, así sabes que yo no era la adecuada, que hay mas y mejores que yo. No soy ni la mas guapa, ni la mas lista, ni creí que me merecía algo mejor que tu. Simplemente mi mente se elevó hasta el nivel mas peligroso y después de unas partidas: Game over.

          Se que está mal, y que no se como me atrevo a decírtelo, si en realidad no me debería atrever a decírmelo a mi misma.

          Pero un engaño es algo del que tenías que enterar, así que espero que seas feliz, lo siento.”

Anónimo